DEFECTOS REFRACTIVOS

El ojo funciona casi igual que una cámara fotográfica. Tiene un pequeño orificio anterior por donde entra la luz, y un elemento receptor en el fondo que es la retina y que actúa como la película de la cámara fotográfica. Allí se forman las imágenes, que luego son transportadas al cerebro por impulsos eléctricos. Para ver claramente, la luz debe enfocar exactamente en la retina.

Cuando, por alteraciones en la forma del ojo, la luz no enfoca exactamente en la retina, tenemos un defecto de refracción. Es decir, se ve mal porque están desenfocados.

LOS PRINCIPALES DEFECTOS DE REFRACCION SON:

Miopía: Ocurre cuando los rayos de luz enfocan delante de la retina debido a que el ojo es muy largo. Los miopes pueden ver bien de cerca pero la visión se enturbia a medida que los objetos se alejan.

Hipermetropía: Cuando los rayos de luz se enfocan en la retina, lo hacen por detrás debido a que el ojo es más corto. Habitualmente no ven bien de lejos y muy mal de cerca.

Astigmatismo: Ocurre cuando los rayos de luz enfocan en más de un punto en la retina. Las imágenes aparecen distorsionadas y les falta nitidez. El astigmatismo puede presentarse solo o junto con miopía o hipermetropía. El ojo es como una pelota de rugby.

Presbicia: Es una condición no patológica debida al endurecimiento de los elementos de enfoque del ojo, que impide ver con nitidez los objetos cercanos, por ejemplo en la lectura. Aparece en la cuarta década de vida y, mientras se acentúa más en el hipermétrope, en el miope se compensa por el defecto óptico previo (ve bien de cerca). La presbicia no se modifica por la cirugía refractiva.

CIRUGIAS REFRACTIVAS - EXCIMER LASER

El Excimer Láser es una tecnología que permite la corrección quirúrgica de los errores de la visión con un gran margen de precisión, control y seguridad.

Por medio de este procedimiento la córnea es tallada para ajustarse a los defectos de la refracción. El láser empleado tiene la capacidad de remover moléculas de tejido sin producir calor, y con ello evitar daños estructurales de la córnea.

Esta cirugía elimina entre el 90% y el 100% de defecto. De todas maneras esos pequeños defectos de refracción pueden solucionarse con el uso de lentes de descanso.

TÉCNICA LASIK:

Esta técnica ofrece varios beneficios en comparación con otras formas de corrección de la visión, debido a que se realiza bajo la protección de una capa de tejido. Como resultado de esto, es menor la cantidad de tejido superficial a cicatrizar.

¿QUIEN PUEDE OPERARSE?

En general, el candidato ideal para Lasik es mayor de 25 anos de edad con córneas sanas. Para ello deberá hacerse un estudio cuidadoso de sus ojos: una Topografía (mapa de la superficie de la córnea) y se evaluará el grosor de la misma mediante una Paquimetría. Asimismo, los candidatos no deben haber tenido en los últimos doce meses aumentos significativos en sus prescripciones.

EL PROCEDIMIENTO

1. Luego de colocarle unas gotas anestésicas sobre la córnea y un soporte en los bordes del párpado para prevenir su parpadeo, un instrumento, llamado microquerátomo, levanta una delgada capa de la córnea. Durante este proceso usted puede sentir una pequeña presión y por escasos segundos ve todo negro.

2. Durante el tratamiento, en muy pocos segundos una luz ultravioleta y pulsos de alto poder del Láser Excimer tallan la córnea. Ajustando el patrón del rayo láser es posible tratar moderados y bajos niveles de miopía, astigmatismo e hipermetropía.

3. Después que el tejido ha sido corregido, la lámina corneal se coloca de vuelta en su posición original. Debido a la extraordinaria cualidad natural de la córnea para adherirse, no se requieren puntos de sutura. El procedimiento completo toma no más de 10 minutos y no es doloroso. Algunos pacientes reportan sensación de cuerpo extraño, lagrimeo y molestias a la luz, posterior a la operación, lo cual puede ser normalmente aliviado con medicamentos (analgésicos). La mejoría visual comienza desde el primer día. La mayoría de los pacientes regresan a sus actividades normales en uno o dos días.